Después de unos minutos de ver los noticieros del televisor, decidí apagarlo.
Confundido y ofuscado fui al estudio de mi maestro.
Toque suavemente la puerta.
-Pasa- me indico desde adentro.
Sigilosa y respetuosamente entre a su estudio, el cuál contenía su amplia biblioteca.
- Maestro- me dirigí a el- ¿Qué son los políticos?
El maestro, quien leía un viejo libro encuadernado en cuero, cerro este y tomo con su mano izquierda la pipa de madera que fumaba.
- Un político es un ser con una astucia inmensa, un ego muy grande, una inteligencia promedio, un corazón pequeño y un espíritu inexistente- me respondió al momento que exhalaba una bocanada de humo.
Mientras él volvía a colocar la pipa en sus labios y abrir nuevamente su libro, yo me retire con el estomago revuelto, impactado ante lo absurdo y escatológico de mi realidad.
Confundido y ofuscado fui al estudio de mi maestro.
Toque suavemente la puerta.
-Pasa- me indico desde adentro.
Sigilosa y respetuosamente entre a su estudio, el cuál contenía su amplia biblioteca.
- Maestro- me dirigí a el- ¿Qué son los políticos?
El maestro, quien leía un viejo libro encuadernado en cuero, cerro este y tomo con su mano izquierda la pipa de madera que fumaba.
- Un político es un ser con una astucia inmensa, un ego muy grande, una inteligencia promedio, un corazón pequeño y un espíritu inexistente- me respondió al momento que exhalaba una bocanada de humo.
Mientras él volvía a colocar la pipa en sus labios y abrir nuevamente su libro, yo me retire con el estomago revuelto, impactado ante lo absurdo y escatológico de mi realidad.